A la AT. del Sr. D. Juan Carlos Borbón Borbón
Muy Sr. Mío:
Me dirijo a Vd. -cosa que no suelo hacer a menudo entre mis empleados- debido, esencialmente, a la especial situación generada por la crisis económica que ha repercutido gravemente en mi economía familiar y que, como Vd. ya sabe, es una de las empresas de las que Vd. cobra puntualmente sus emolumentos.
Como se podrá imaginar, la angustiosa situación económica producida nos ha llevado a plantearnos una lógica reestructuración de personal y, dado que Vd. es nuestro empleado más caro y que recibe su salario a través de nuestros impuestos, hemos empezado a examinar su rendimiento, para ver si el mismo se corresponde con la generosa remuneración que entre todos los españoles le hemos asignado, es decir, 9 millones de euros (unos 1.500 millones de pesetas) de los que Vd. puede disponer libremente y distribuirlos como quiera, sin ni siquiera desglosar sus gastos ante el Parlamento español.
Examinando el contrato que le hicimos en el año 1978, desearíamos que se centrase en el apartado denominado Artículo 56 párrafo 1 y que dice lo siguiente:
"El Rey es el Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia, arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones, asume la más alta representación del Estado Español en las relaciones internacionales, especialmente con las naciones de su comunidad histórica, y ejerce las funciones que le atribuyen expresamente la Constitución y las Leyes."
También desearía que echase un vistazo al Artículo 61 párrafo 1 del mismo:
"El Rey, al ser proclamado ante las Cortes Generales, prestará juramento de desempeñar fielmente sus funciones, guardar y hacer guardar la Constitución y las Leyes y respetar los derechos de los ciudadanos y de las Comunidades Autónomas."
Hemos resaltado en negrita aquellas funciones que, a nuestro parecer, ha incumplido a lo largo de estos años, pues, en todo este tiempo, no ha hecho absolutamente nada por mantener la unidad de los españoles, desde el primer momento gravemente amenazada -y de forma creciente- por el separatismo catalán y vasco.
En este tiempo tampoco ha arbitrado y moderado el funcionamiento regular de las instituciones, pues de todos son conocidos los continuos problemas en las elecciones de los miembros del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional que, estos años, han servido de arma arrojadiza entre los distintos partidos políticos y que regularmente han puesto en peligro la estabilidad institucional.
Por último, tampoco ha hecho respetar los derechos de los ciudadanos y de las Comunidades Autónomas, siendo los más claros ejemplos la prohibición, para muchos ciudadanos españoles, de recibir su educación en español en Cataluña y las multas que esa institución denominada Generalidad Catalana ha impuesto sobre sus compatriotas por rotular en español sus comercios.
Dada la clara dejación de funciones que ha ejercido a lo largo de estos años, a pesar de la generosa retribución que le habíamos asignado, nos vemos, por tanto, en la necesidad de rescindir su contrato.
El despido tendrá efectividad desde el momento en que se reúna la Junta de Accionistas convocada a un referéndum sobre la Monarquía, que esperamos -si a los españoles les entra algo de luz en la cabeza- se convoque a la mayor brevedad posible.
8 Déjame un comentario, chati:
No soy monárquico, pero aún mucho menos, soy republicano, entendido como se entiende en España, con cambio de banera incluido, y la figura del Rey me parece un mal menor, muy colateral, y atacarle es, una vez más, seguirle el juego a los independentistas.
El mundo no es perfecto. La humanidad no es perfecta. Las leyes no son perfectas. Los humanos no somos perfectos. Está claro que el Rey no es perfecto.
Sinceramente, se pueden tener enemigos. Vale. Pero en toda guerra se debe desarrollar una estrategia, ser coherente y estudiar prioridades.
No doy a España por perdida, aún, pero leyendo las ideas destructivas, incluso dando por sentado que Cataluña o Vascongadas, no son España, y que hay que boicotear sus productos, de aquellos que dicen ser españoles y curiosamente, defensores de la unidad de España, me doy cuenta de que mientras los independentistas, por idiotas que sean, tienen una estrategia bien definidad y coherente, los que se dicen defensores de la unidad nacional, no sólo no la tienen, es que atacan justamente, que casualidad, todo lo que atacan los indepentistas.
Resumiendo: me parece que más de uno tendría que hacerse un planteamiento frío, sin tripas, descarnado, de qué es lo que pretende conseguir, y como, y después llegar a sus propias conclusiones, porque leo demasiadas cosas de gente que dice defender España y su unidad, que cambiando cuatro palabras supérfluas, podrían ser firmadas por los independentistas.
Yo no soy monárquico, creo que el Rey no lo está haciendo demasiado bien, que actúa demasiado como un bribón vividor, que en la actual situación de crisis debería hacer alarde de austeridad extrema, incluso con gestos que pongan en ridículo a la clase política, de la cual no recibe más que coces, pero ya hace tiempo que leí y escuché comentarios de que el Rey es como es, y que si no fuera por la reina, sería aún más Borbón. Pongo Borbón por no poner otra palabra.
Un saludo.
Hola, Stop:
No estoy de acuerdo contigo en una cosa: dices que "atacarle es, una vez más, seguirle el juego a los independentistas".
Precisamente muchos opinamos que dejar a esta persona en concreto al mando de esa institución sí es hacerle el juego a los independentistas.
Este personaje que instauró Franco, no hace nada para mantener la unidad de España -de hecho, no hace nada de nada-. Y la mejor forma de que los independentistas consigan sus objetivos es que esta persona siga en el poder, para que el resto de los españoles nos creamos "protegidos", cuando, en realidad, no va a mover ni un solo dedo jamás.
Un saludo.
Ya, pues anda, que si hay un referendum y sale república... te digo yo que España no duraba ni medio mes más.
Puede que tengas razón, Zadlander, pero, en mi opinión, este señor no ha hecho absolutamente nada por la unidad de España en todo el tiempo que lleva reinando.
No podemos opinar porque no es nuestro rey, pero a pesar de que en Argentina existe la forma de gobierno republicana, nuestra presidente (bruta que insiste en llamarse "presidenta") se maneja como una reina, mientras nosotros, sus lacayos (porque no nos ve ni respeta como empleadores) nos arreglamos como podemos.
Parece que en todos lados hay personas que no saben hacer su trabajo, o no hacen nada de nada...
Saludos!!
Bueno, no ha hecho nada ni bueno ni malo. En una república, todo sería malo.
Hola Paul. Normalmente en los medios catalanes, principalmente en la televisión pública, se suele hacer mofa de la familia real.
La situación es que incluso sin hacer nada, ni bueno, ni malo, los independentistas critican al rey. Pero como no hace nada, la cosa queda un poco absurda.
No quiero ni imaginarme lo que dirían del Rey si hiciera algo que desagradara a los independentistas.
La siguiente cuestión es: ¿qué puede hacer? Los dos grandes partidos, PSOE y PP, hacen su teatrillo, pero están a tope con el tema de los Estatutos. Lo que en un lado se recurre, en el otro se bendice como bueno.
Los medios de comunicación están todos controlados por el PSOE y los partidos nacionalistas identitarios vía subvención pública, ya sea de la CC.AA o del municipio.
Los jueces y fiscales están completamente politizados, no son independientes, e incluso el Tribunal Constitucional defiende la Constitución de una forma tan tíbia que para ellos el derecho a escolarizar en Cataluña a tu hijo en castellano, pues es algo que no tiene motivo que se cumpla. Esa es la realidad.
Con semejante tinglado, donde todos reman en la misma dirección... ¿qué puede hacer el Rey, inmolarse?
Bajo mi punto de vista, creo que sería peor el remedio que la enfermedad.
Un saludo.
EN ESPAÑA NO HAY QUIEN SIENTA ORGULLO DE DECIR "SOY ESPAÑOL". MÉXICO ES EL UNICO PAIS EN DONDE EXISTE EL ORGULLO DE DECIR S"OY ESPAÑOL". La resiente abrogación de la ley norteamericana que limitaba los gastos electorales de las empresas sujeta las contiendas políticas al poder del dinero. Los gobiernos y los empresarios hispanos deben seguir el ejemplo del lobby judío. Formando un lobby que financie el cabildeo y las campañas electorales de los políticos hispanos, a fin de promover las leyes y gobiernos que nos beneficien, y vetar las leyes que nos perjudiquen, como la ley SB 1070. http://www.scribd.com/doc/33094675/BREVE-JUICIO-SUMARIO-AL-JUDEO-CRISTIANISMO-EN-DEFENSA-DEL-ESTADO-LA-IGLESIA-Y-LA-SOCIEDAD
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