Además de Internet y de los códigos de barras, que en los últimos tiempos, han sido identificados como símbolos del 666, el CERN forma parte de ese panteón de inquietantes elementos tecnológicos a los que se han identificado con la Bestia del Apocalipsis.
Fijaos en su logo, con varios 6 entrelazados, y con el dios de la destrucción Shiva, que adorna el edificio:
Algunos científicos especulan con que, cuando el acelarador de partículas (LHC) se ponga a su máxima potencia, podría provocar un agujero negro que consumiera nuestra existencia... 
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2 Déjame un comentario, chati:
Jajaja... Según parece, después de su puesta en marcha, pospuesta unos meses para revisar los cálculos, lo que apareció no fue un agujero negro, sino un sandwich de pollo, como se deduce de los restos de plumas y migas de pan que encontraron al finalizar.
Saludos,
Paulus.
Todavía no ha sido puesto a su máxima potencia... Cuando lo hagan, seguro que aparece un sandwich de solomillo... :-)
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