Al sur del ecuador lunar, en el lado visible de nuestro satélite, se encuentra el cráter Fra Mauro, caracterizado por una gran roca que se desplazó varios kilómetros sobre la superficie, movida por titánicas fuerzas hasta el momento desconocidas por la ciencia, dejando un gran surco detrás de ella, tan grande que resulta visible desde la misma órbita lunar. Podemos observar dicho cráter a la derecha de la imagen:
Unos kilómetros al sureste de Fra Mauro, se encuentra el cráter Alphonsus. Adyacente a la parte exterior de su pared occidental, reposa otra gran roca rodante, con el característico surco detrás de ella que evidencia el misterioso desplazamiento de kilómetros de distancia que experimentó, de la misma forma que la anterior. A la izquierda de la foto puede observarse dicho surco:
Por último, en la región sureste del lado visible, muy cerca del Mare Nectaris y casi en la misma latitud del cráter Alphonsus, se encuentra en cráter Theophilus, en uno de cuyos bordes reposa otra gran roca rodante de dimensiones parecidas a las anteriores, con un gran surco que da evidencia de su misterioso desplazamiento.
Extraído de: El Dragón Invisible.
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1 Déjame un comentario, chati:
Esto se parece a las rocas viajeras del valle de la muerte, que se mueven lentamente, dejando surcos por donde pasan. No se trata del viento ni de una inclinación del terreno, porque is se ponen varias piedras en el mismo sitio, algunas se van en direcciones distintas y otras se quedan quietas.
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