Hoy se inicia un nuevo escrache en torno al Congreso de los Diputados de España...
La fecha elegida -el 25 de abril- es totalmente simbólica, pues representa el inicio de la siempre recordada Revolución de los Claveles de Portugal, aquella que puso fin al régimen despótico luso mientras en España aún lustrábamos las botas del Caudillín...
Tras las cifras de paro conocidas hoy mismo, de unos seis millones doscientos mil desempleados (más de un 27% de la población activa), no es de extrañar, pues, que estos movimientos vayan progresivamente in crescendo hasta, posiblemente, derrocar al actual Régimen...
Pero ahí es adonde voy... ¿Es correcto emplear la palabra "régimen" para describir el actual sistema político español...?
Normalmente utilizamos dicho vocablo para referirnos a sistemas de Gobierno totalitarios: véanse el "régimen soviético" o el mencionado "régimen franquista"...
¿Pero existe en España, realmente, un "régimen" político... o disfrutamos, por el contrario, de una envidiable democracia...?
Mi tesis -y la de muchos- es que en España nunca ha existido una auténtica democracia real...
Las diferencias entre dictaduras y democracias no conforman jamás una imagen en blanco y negro, sino una detallada pintura en escala de grises...
Tener una auténtica democracia no consiste tan sólo en depositar una papeleta en una urna cada cuatro años...
En una auténtica democracia, el Jefe de Estado es elegido periódicamente... Y ante una mala gestión, su mandato temporal es, democráticamente, liquidado por sus ciudadanos...
En una auténtica democracia, ninguna figura política es "inviolable", y puede ser sometida a juicio ante los demás ciudadanos si su comportamiento, en algún caso, es delictivo... En España, por el contrario, "nos ha dado" la cobardía de nuestros padres y nuestros abuelos la figura de un Monarca que jamás podrá ser juzgado por ningún tipo de delito...
En una auténtica democracia, los tres poderes que la conforman (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) están estrictamente separados... En España tan sólo podemos elegir uno de esos poderes (el Legislativo), que, a su vez, se encarga de elegir a los demás: el Ejecutivo y las altas instancias del Judicial... Como mera orientación al confundido pueblo español, señalaré, por ejemplo, que, en Estados Unidos, existen elecciones independientes para el Ejecutivo (la elección del Presidente/Jefe de Estado de la nación) y para el Legislativo (Congreso y Senado). Como mera anécdota, indicaré que, en la nación americana, también hay elecciones a los comisarios y fiscales de distrito, y a los jueces de baja instancia... Si, por ejemplo, aumenta la delincuencia en un determinado barrio, los comisarios y fiscales correspondientes lo tendrán muy crudo para su reelección, lo que les obliga a trabajar más eficientemente...
En una auténtica democracia, el voto debe ser proporcional, como en nuestra Segunda República... Por contrate, el sistema electoral español, prima, por ejemplo, a partidos nacionalistas mucho menos votados que otros de ámbito nacional... Y así nos va... Las minorías gobernando sobre la mayoría...
En una auténtica democracia, los referendos son vinculantes (por ejemplo, sin ir más lejos, en la misma Italia) y no meramente consultivos, como en España... En nuestro país, el pueblo puede decidir sobre determinada cuestión y el Ejecutivo, legalmente, puede ignorar legalmente dicha decisión mayoritaria...
En una auténtica democracia, los programas políticos son auténticos "contratos" ante la sociedad... En España, por ejemplo, acabamos de asistir al más vergonzoso ejemplo de Gobierno de toda su Historia, en la que un partido político (el hipócrita Partido Popular) gana las elecciones prometiendo que va a realizar determinadas políticas y, a los pocos días, acomete justamente las contrarias... En un país serio, todo este grupo de gobernantes que han alcanzado el poder a través de la mentira ya hubieran dimitido... Y, en un país aún más serio, ya estarían -sencillamente- encarcelados...
En un país auténticamente democrático las listas electorales de los congresistas son completamente abiertas y usted podrá elegir al diputado de su distrito...
En un país auténticamente democrático existen primarias entre todos sus militantes para la elección a los candidatos a la Presidencia de Gobierno...
Estos dos últimos puntos diluyen lo que se denomina "partitocracia"... Es decir, cada diputado se debe a sus electores y no a su partido...
Como veréis, no todos los países que se autodenominan "democracia" siguen a pies juntillas este guion de mínimos de libertad, y eso les confiere un mayor o menor grado de diferencia respecto a una dictadura...
Pero, en el caso español, no se cumplen ni uno de los anteriores puntos...
Por tanto... Es completamente correcto decir que, en España, vivimos bajo un "Régimen" político y no en una auténtica democracia...
El Régimen español consiste simplemente en dictaduras parciales de cuatro años...
Y a los regímenes, ya sabéis, queridos amigos, cómo se les pone fin...
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